Becky G es sin duda una de las estrellas del momento en la música latina. Esta joven nacida en California en 1997 y de ascendencia mexicana siempre tuvo muy claro que quería dedicarse al mundo
del espectáculo. En 2011 comenzó a grabarse cantando versiones de sus canciones favoritas y a publicarlas en YouTube y eso le sirvió de plataforma para llamar la atención de varios productores
discográficos. Grabó varias canciones que publicó en su lengua materna pero el gran salto lo dio cuando decidió enfocar su carrera en la música urbana y el reggaeton. A día de hoy, cuenta con
grandes éxitos como Mayores con Bad Bunny, Sin Pijama con Natti Natasha y un disco publicado en 2019 bajo el título de Mala Santa que la colocan en un puesto muy destacado dentro de la industria.
Su carrera va viento en popa.
Es innegable que Becky ha trabajado muy duro para conseguir la vida que quiere y que ello no siempre ha tenido buenos resultados o buenos momentos. La cantante ha hablado públicamente sobre su
infancia, la cual fue muy complicada debido a problemas económicos que provocaron que sus padres perdieran la casa en la que vivían. Becky asegura que toda esa situación la hizo madurar antes de
tiempo y que vivió una especie de “crisis” a los 9 años porque sintió la necesidad de ayudar a su familia a salir adelante. Por esta razón, comenzó a trabajar en spots publicitarios y otros
trabajos de actuación pequeños.
Pero, por si fuera poco, esto no fue lo único que complicó la infancia de Becky G. La cantante también fue víctima de bullying en el colegio hasta el punto de tener que dejar de asistir a las clases y estudiar desde casa.
Becky se tomó esta época de su vida como algo que le ayudó a crecer, a descubrirse a sí misma y a luchar para salir siempre adelante.